Whisky para los vencidos !
Por si queda algún distraído, don José es el cincuentón ése que tantas veces hemos visto, que gusta vestirse de milico, con las botas por afuera del lompa, y posando con el poncho al hombro en actitud cancherona.
Nunca fue joven, andaba siempre serio como tamanco poniéndose de perfil, usaba nariz aguileña (yo también uso, es re-camba), y soltaba fases célebres sin ton ni son ni demasiada lógica.
Si le venían un un chiste de gallegos el loco te contestaba "Clemencia para los vencidos..."; cuando le pedían opinión sobre qué preparar para la cena o alguna otra pregunta jodida, el tipo para no jugarse te encajaba "Mi autoridad emana de vosotros..", como diciendo decidan ustedes; resumiendo, un auténtico pelmazo, no se podía hablar con él sin que se pusiera trascendente.
Algunos gustan de destacar su condición de militar, mayormente los milicos y/o sus concubinas; otros prefieren hacer énfasis en su condición de líder revolucionario, especialmente los tupas y algún socio electoral de éstos; suelen rememorar sus dotes de ideólogo los burócratas de pocas ideas que mendigan nuestro voto cada 5 años.
No faltará el bagayero que guste de exhaltar las épocas de contrabandista del prócer para justificar esos quilos de dulce de guayaba de más que trae en la mochila.
En la visión más extendida se trata de un sujeto que peleó un rato contra los malos, tiró unas frases medio cursis y después se rajó al Paraguay a tomar mates y mandonear al pobre negro Ansina, y en el recorrido hicieron como una caravana y caceroleada o algo así.
Hace un par de años mi hijo me dijo que en la escuela habían estudiado la Guerra de las Rocas, que por supuesto, no era otra cosa que su versión de la Batalla de Las Piedras, y no es joda.
La verdad es que la información generalizada sobre quién fue realmente éste sujeto no es muy superior a la que tiene mi hijo.
Así que en afán de quedarme con la versión que al menos más disfruto, me quedo con la del Cuarteto.
El Día Que Artigas Se Emborrachó
"Mi autoridad es la hermana de vosotros
y ella se deja ante mi presencia soberana"
El día que Artigas se emborrachó
hizo cualquier cagada como un buen señor
pero como ningún libro nunca lo contó
por eso ahora agarro y se los cuento yo.
Con la lengua trabada explicó el general
qué color en su bandera iba a utilizar:
"blanco y rojo en honor al vino que me tomé,
y azul por el pedo que después me agarré".
Se emborrachó, porque la guerra perdió
y se emborrachó, porque alguien lo traicionó
se emborrachó, y la patria se lo agradeció.
"Llegamos al Ayuí con el éxodo oriental"
gritaba haciendo eses nuestro general
y un paisano le avisó "pero usté está en cuete,
éste no es el Ayui, no ve que es el Miguelete".
Llegó al Hervidero y antes de tropezar
preguntó a que hora tocaba la Banda Oriental
se tomó un bicarbonato que después eructó
y le puso a ese pueblo Purificación.
Se emborrachó, porque la guerra perdió
y se emborrachó, porque alguien lo traicionó
se emborrachó, y la patria se lo agradeció.
Ese día dejó como a diez embarazadas
se casó con la prima que era medio retardada
le dijo a Posadas "agarrala que me crece",
y vomitó en las instrucciones del año trece.
Mamado hasta las patas dijo "me gusta esa china"
y en realidad no era otro que el negro Ansina,
fajó a Lavalleja que le quiso explicar
pero el pedo se le fue recién en el Paraguay.
Se emborrachó, porque la guerra perdió
y se emborrachó, porque alguien lo traicionó
se emborrachó, y la patria se lo agradeció.
"Whisky para los vencidos!"
El Cuarteto de Nos