Consejos domésticos para inútiles
Estos consejos son exclusivamente para inútiles.
Si no lo es, el presente artículo difícilmente entrañe algo de interés para usted.
El único objetivo de éstos consejos es evitar a las nuevas generaciones de inútiles caer en los mismos errores que nosotros.
Lo nuestro no es teoría, sabemos de qué hablamos.
Es imposible incluir en un solo post todos los consejos necesarios para que un inútil logre sobrevivir 24 horas en su hogar, así que lo haremos en entregas sucesivas.
Comencemos pues.
Para freír milanesas:
1.- Usar siempre camiseta, chaleco, o similar.
No importa si tus abdominales parecen una tabla de lavar, o si tus pectorales son la envidia de Arnold Schwarzenegger. Aunque así sea, usá camiseta.
Con mucha más razón si tu abdomen asoma de manera poco prudente presentando un blanco fácil por tamaño y cercanía a la sartén.
Podés hacerte el sexy antes o después de freír milanesas, nunca durante.
2.- Usar siempre zapatos, botas o similar.
Jamás de los jamases emprendas tamaña empresa descalzo, o en chancletas, sandalias, romanitas, etc.
Ellas sí pueden, vos no.
Por alguna misteriosa razón, todo ese aceite que va desapareciendo de la sartén obligándonos a agregar medio litro más luego de cada milanesa, se va materializando en el piso, y está caliente.
Ponete algo en los pieses, y no lo pises.
3.- Saber que igual te vas a quemar.
A pesar de seguir escrupulosamente los pasos anteriores te vas a quemar, pero hemos evitado que arruines el equipo de manera permanente.
Cómo enfrentar entonces el doloroso destino que aguarda agazapado al incauto freidor de milanesas ?
3a.- Tener siempre en casa crema Dr Selby, la vas a necesitar.
3b.- Saber dónde mierda está la maldita crema Dr Selby.
De poco servirá que tengas pero no aparezca en el momento clave.
3c.- Dejar a mano antes de empezar los teléfonos de algún pariente (es fundamental que se trate de un no-inútil), la sociedad médica, la emergencia móvil y los bomberos.
Con seguridad necesitarás por lo menos acudir a uno, en ocasiones a todos.
4.- Poner la música muy alta.
Es la mejor forma de que no se escuchen tus aullidos de dolor.
No olvides que siempre es mejor que la vecina crea que somos un rocker salvaje y no un degenerado sadomasoquista.
Haceme caso, que vas a gritar, vas a gritar, mejor que no se escuche bien lo qué.
Observando estos sencillos consejos, y con mucha práctica, freír milanesas dejará en pocos meses de ser un deporte extremo para convertirse en una actividad relativamente sencilla.
Nos vemos en la próxima
Apéndice 1:
Mantener siempre por lo menos un ojo sobre la milanesa.
No importa si recién la miraste, si recién la pusiste, si el aceite estaba frío, NO IMPORTA.
Cuando la vuelvas a mirar estará irremediablemente carbonizada.
Debido a éste curioso comportamiento de las milanesas y otras frituras, se desaconseja enfáticamente hacer cualquier otra cosa mientras se fritan milanesas, como por ejemplo venir a escribir estupideces en el blog.
Si no lo es, el presente artículo difícilmente entrañe algo de interés para usted.
El único objetivo de éstos consejos es evitar a las nuevas generaciones de inútiles caer en los mismos errores que nosotros.
Lo nuestro no es teoría, sabemos de qué hablamos.
Es imposible incluir en un solo post todos los consejos necesarios para que un inútil logre sobrevivir 24 horas en su hogar, así que lo haremos en entregas sucesivas.
Comencemos pues.
Para freír milanesas:
1.- Usar siempre camiseta, chaleco, o similar.
No importa si tus abdominales parecen una tabla de lavar, o si tus pectorales son la envidia de Arnold Schwarzenegger. Aunque así sea, usá camiseta.
Con mucha más razón si tu abdomen asoma de manera poco prudente presentando un blanco fácil por tamaño y cercanía a la sartén.
Podés hacerte el sexy antes o después de freír milanesas, nunca durante.
2.- Usar siempre zapatos, botas o similar.
Jamás de los jamases emprendas tamaña empresa descalzo, o en chancletas, sandalias, romanitas, etc.
Ellas sí pueden, vos no.
Por alguna misteriosa razón, todo ese aceite que va desapareciendo de la sartén obligándonos a agregar medio litro más luego de cada milanesa, se va materializando en el piso, y está caliente.
Ponete algo en los pieses, y no lo pises.
3.- Saber que igual te vas a quemar.
A pesar de seguir escrupulosamente los pasos anteriores te vas a quemar, pero hemos evitado que arruines el equipo de manera permanente.
Cómo enfrentar entonces el doloroso destino que aguarda agazapado al incauto freidor de milanesas ?
3a.- Tener siempre en casa crema Dr Selby, la vas a necesitar.
3b.- Saber dónde mierda está la maldita crema Dr Selby.
De poco servirá que tengas pero no aparezca en el momento clave.
3c.- Dejar a mano antes de empezar los teléfonos de algún pariente (es fundamental que se trate de un no-inútil), la sociedad médica, la emergencia móvil y los bomberos.
Con seguridad necesitarás por lo menos acudir a uno, en ocasiones a todos.
4.- Poner la música muy alta.
Es la mejor forma de que no se escuchen tus aullidos de dolor.
No olvides que siempre es mejor que la vecina crea que somos un rocker salvaje y no un degenerado sadomasoquista.
Haceme caso, que vas a gritar, vas a gritar, mejor que no se escuche bien lo qué.
Observando estos sencillos consejos, y con mucha práctica, freír milanesas dejará en pocos meses de ser un deporte extremo para convertirse en una actividad relativamente sencilla.
Nos vemos en la próxima
Apéndice 1:
Mantener siempre por lo menos un ojo sobre la milanesa.
No importa si recién la miraste, si recién la pusiste, si el aceite estaba frío, NO IMPORTA.
Cuando la vuelvas a mirar estará irremediablemente carbonizada.
Debido a éste curioso comportamiento de las milanesas y otras frituras, se desaconseja enfáticamente hacer cualquier otra cosa mientras se fritan milanesas, como por ejemplo venir a escribir estupideces en el blog.
